Maja Vestida y Caballero: amores imposibles
Él... el caballero de la mano en el pecho
EL CABALLERO DE LA MANO EN EL PECHO (El Greco, S.XVI) es un hombre formal, cristiano, de palabra y de honor. Y aunque nadie conozca exactamente su pasado, todos se fían de él.
Mucho se ha elucubrado sobre su verdadera identidad. Desde un autorretrato del Greco, hasta la imagen del mismísimo Don Miguel de Cervantes Saavedra, este educado caballero ha sido un enigma desde su creación.
Son precisamente su mirada enigmática y su palidez a lo “Crepúsculo” las que le han valido un grupo importante de admiradoras que no paran de llamar o mensajear, a pesar de que él sólo responda con una media sonrisa.
Su corazón ya tiene dueña. Y aunque parezca imposible, ella le corresponde.
Ella... la Maja (a veces) vestida
LA MAJA VESTIDA (Goya, S.XIX) es más guapa que la desnuda, dicen. Y más sensual. Porque ya se sabe que en el arte de provocar, a veces, menos es más…
Su ropa delata su noble origen, así que apenas suena el timbre se planta los vaqueros ajustados, su top favorito, las gafas oscuras oversize y su labial más rojo. Lista para despistar papparazzis!
Ha quedado otra vez con él y nadie se puede enterar.
La historia
En horario laboral nadie pensaría que tienen algo. Pero cuando el museo cierra sus puertas, ELLA – tan maja- y ÉL –tan caballero- pasean su amor entre abedules y patos.
Qué tendrán en común, cuchichean sus compañeros. “Él, tan mayor; ella, tan inmadura”; “Él, tan formal; ella, tan descarada”. Y luego otros recuerdan que tienen en común, su origen nobiliario; sus gustos refinados.
Pocos saben que han nacido para estar juntos, contemplando el atardecer, mientras releen ese poema y lo maridan con ese vino.
El genio
Las grandes ideas no siempre llegan a la primera, pero en este caso, Jacobo Muñiz acertó desde el boceto, que es casi tan genial como el resultado final de Maja y Caballero!
De esta forma, nos cautivó con una Maja tipo Van Gogh, pero nos convenció con un Caballero de Dalí 🙂...
Aunque Jacobo, con su excepcional uso del color, nos deleitó con su versión poética y filosófica de La Maja vestida y el Caballero de la mano en el pecho en medio de la Otoñada de El Retiro (ver boceto en tonos rojizos, abajo), Madrid le pedía alargar el verano… y así quedó… una lámina con predominancia del color menta, que tan bien encaja en estilos decorativos que hoy son tendencia.
Un Madrileñer lleno de detalles
Un atardecer, una copa de vino, una buena conversación… y El Retiro pone el decorado perfecto:
- Amor entre ahuehuetes.
- Amor entre castaños.
- Amor entre magnolios.
- Amor reflejado en los cristales del Palacio.
- Amor con M de Madrid.